Posiblemente sea transparencia una de las palabras más frecuentes en estos días de elecciones autonómicas y municipales. La imagen que preside este texto está tomada del artículo de prensa aparecido en segundo lugar entre los casi 900.000 resultados que ofrece Google Noticias cuando buscas por transparencia política (17/05/2015, 13:38h).
Aragón, Asturias… y así, por orden alfabético, hasta completar con Murcia y Navarra las 13 autonomías que se encuentran en campaña electoral. Cuando el lector acude a la fuente original comprueba que la comunidad autónoma que sale peor parada es Madrid y una de las más favorecidas, Castilla y León; que el Parlamento cántabro roza la perfección, con un índice de transparencia de 98,8 sobre 100 según los cálculos de Transparencia Internacional España; que cinco autonomías carecen de una ley de transparencia, etcétera.
Con los datos en la mano, esto es lo que hay: una situación mejor, sin duda, que la de hace años, cuando la idea de transparencia, y no digamos su práctica, estaban mucho menos extendidas. Por lo que debemos felicitarnos… sin llegar a sentirnos satisfechos; pero no por todo lo que queda por hacer, sino porque lo hecho hasta aquí esconde dos serias limitaciones: una de credibilidad, otra de carácter práctico. Para ilustrar ambas causas de opacidad he elegido estas dos imágenes con sus correspondientes pies de foto:
- Falta de credibilidad : El caso del ayuntamiento de Sabadell –premiado en 2010– hace de Transparencia Internacional España un aval bajo sospecha. ABC.es , 27 noviembre 2011, 21:53h
- Condición necesaria pero insuficiente: La transparencia sin calidad, es decir, sin objetivos de mejora permanente de las actividades, es un engañabobos. Una vindicación de la acción política, figura 22 (pág. 96)
Y es que las instituciones que no predican con el ejemplo, las que lo confían todo a las leyes y actúan únicamente bajo la presión social, sin comprometerse libre y públicamente con objetivos de mejora, convierten la transparencia en una anestesia para incautos.
Felipe Gómez-Pallete Rivas
Presidente de la Asociación por la Calidad y Cultura Democráticas
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